Carta de Amor

  Querida amiga, aprovecho este 14 de Febrero para escribirte esta carta, porque sé que tu has dejado de creer en el amor con todas aquellas malas experiencias que te ha hecho pasar la vida, por ello quiero demostrarte con esta historia, que el amor llega cuando menos y con quién menos esperas.

  "Era noviembre, una tarde de lluvia, en la cual lo único que apetecía era buena compañía y un buen chocolate. Sara, una chica alta, de ojos claros y pelo rubio, y Julia, una chica bajita, de ojos negros y pelo negro, iban de camino a casa, ya que acababan de salir de la academia de inglés. Eran dos chicas completamente diferentes, pero si algo tenían en común era la gran amistad que compartían, ya que habían crecido juntas. La complicidad que tenían era admirable.
Sara, se despidió de Julia y se fue a su casa, en la cual vivía con su novio, Martín. A Sara algo le faltaba, no era lo feliz que le gustaría ser.

  Los días pasaban, y todo seguía igual. Lo que ninguna de las dos sabían es que en ellas había despertado una gran curiosidad y un especial interés por la otra. Las horas juntas se pasaban volando, jamás habían conseguido estar tan agusto con alguien, jamás se habían sentido tan queridas y valoradas. Ahí, cada una por su parte, en el silencio de sus noches, fue cuando se dieron cuenta de que aquello era algo más que una amistad, pero aquel miedo a que el sentimiento no fuera mutuo les frenaba. Sara pensó que lo primero que tenía que hacer era hablar con Martín y decirle todo lo que estaba sintiendo por Julia, este lo comprendió aunque sentía que le estaban rompiendo el corazón a cachitos, le deseó toda la felicidad del mundo y le dijo que lo iba a tener siempre para todo lo que necesitara. Martín recogió sus cosas y se fue a vivir con sus padres y Sara se quedó en la casa que ambos anteriormente compartían.
 
Pasó una semana, estaba Sara en la ducha, se sentía triste y sola, estaba llorando, como solía hacer la mayor parte del día.. necesitaba a Julia, necesitaba sentir su cuerpo junto al suyo, necesitaba su olor y sobretodo su amor. Sonó el timbre, esta no imaginaba quien podía ser, salió de la ducha y se dirigió a la puerta, abrió y era Julia. De repente un enorme silencio inundó todo. Ambas se miraron y sintieron que no había nadie más en el mundo, que solo estaban ellas dos. Julia se acercó a Sara, le acarició la cara quitándole a la vez una lagrima que caía por su mejilla y la besó, le dio el beso más bonito que jamás le habían dado, y le dijo que la quería junto a ella, que no había nadie que la hiciera mas feliz en este mundo, y que la necesitaba, que la necesitaba como aire para respirar."

  Amiga, como ves el amor existe, y para todos llega. Para mi no hay nada más bonito que querer y sentirse querido, no hay nada más bonito que compartir tu tiempo con alguien especial, con alguien que tienes esa necesidad de compartir el resto de tu vida.

¡FELIZ SAN VALENTÍN, AMIGA!


                                                                                      Atentamente: Tu amiga, Cristina.